¿Cómo quedar embarazada? Si tienes problemas de fertilidad hay pequeños trucos dietéticos que van ayudarte a restablecer de un modo natural el equilibrio de tu cuerpo y ayudarte con tu fertilidad.
Aunque cada persona presenta un patrón diferente en sus problemas de fertilidad, aquí os doy unas recomendaciones generales para todas aquellas mujeres (y hombres) que deseen quedar embarazadas:
1. Come comida alcalina más que comida acidificante, para ayudar a todo tu aparato reproductor con un pH correcto para la concepción e implantación. La comida acidificante como la carne, productos lácteos y la mayoría de los granos, producen acidez en el medio. El moco cervical fértil si se acidifica puede convertirse en un medio hostil para el esperma, el cual necesita un medio alcalino para sobrevivir. Como la saliva es además alcalinizante es recomendable masticar la comida conscientemente y también ensalivar las sopas y la comida líquida. No estoy diciendo que tu dieta tiene que ser vegetariana, pero si quieres quedar embarazada tu dieta debería estar basada en comida alcalinizante como son la fruta y los vegetales.
2. Come ácidos grasos esenciales en abundancia, omega 3 y omega 6. Los ácidos grasos esenciales (ácido linoleico y alfa-linolénico) son esenciales para todas las células del cuerpo. Son además un elemento clave para la ovulación. Buenas fuentes de estos ácidos grasos son el pescado, el aceite de pescado, los aceites no hidrogenados (vírgenes prensados en frío y de la primera prensión) como el de oliva y el de girasol, huevos, frutos secos y semillas (todos deben consumirse sin tostar y sin salar). Ten también en cuenta que las grasas trans pueden trastornar el funcionamiento del sistema inmune y del aparato reproductor y por tanto deben evitarse a toda costa.
Estas grasas las puedes encontrar en la margarina, grasa animal, aceites refinados o en las frituras y aceites hidrogenados que puedes encontrar en la mayoría de las comidas procesadas (galletas, bollería y toda la comida industrial). Los omega 3 se ha demostrado que limpian la sangre de los depósitos de grasa, reducen la coagulación, y aumentan el flujo del de la sangre a tejidos, incluyendo el útero. Además fortalecen el sistema inmune y se ha descubierto que reducen el número de ciertas células inmunológicas (NK o natural killers) que previenen que el embrión se implante en el útero.
3. Come comida orgánica y carne libre de hormonas siempre que te sea posible. La comida orgánica es importante para mantener tu sistema hormonal equilibrado ya que muchos de los pesticidas, sustancias químicas y hormonas utilizadas para tratar y producir alimentos contienen estrógenos sintéticos que ocupan los receptores celulares de los estrógenos y tienen efectos negativos en nuestros órganos y el sistema endocrino. En el proceso de la comida, esta pierde parte del contenido nutricional, y cuanto más procesada sea más grande es la pérdida. Lo mismo se aplica a la comida que no es integral, la comida precocinada, la enlatada o a los zumos embotellados; todos ellos son alimentos procesado que están muy lejos de ser lo que era el alimento original y llenos de conservantes, espesante, colorantes y un largo etcétera de partículas minúsculas que no tienen ninguna función nutritiva pero por lo contrario ensucian tu organismo.
4. Añade a tu dieta vegetales crucíferas como la col, el brócoli, coles de Bruselas y coliflor. Estos vegetales contienen di-indolylmethano, un componente que estimula el uso más eficiente del estrógeno a través de aumentar el metabolismo del estradiol (una forma de estrógeno producido por el cuerpo). El exceso de estradiol se asocia al dolor de mamas, aumento de peso, cáncer de pecho y de útero, irritabilidad y cambios de humor y disminución de la libido.
Este artículo es de carácter informativo y no intenta diagnosticar, ofrecer tratamiento médico o nutricional o reemplazar el consejo de un terapeuta profesional. La toma de remedios naturales y/o plantas chinas no debería realizarse sin consultar a un terapeuta certificado. Consulta a un profesional de la salud para seguir un plan de tratamiento conveniente para ti.